Tú siempre en mi alumbrándolo todo, arropándome siempre tan dulcemente porque sabes que aún soy pequeña y tímida; que te miro de reojo, sonrío y me quedo sin saber que decir. Me quedé tan desierta como el paraje de una fotografía lo cual me recordó lo que me rodea en el preludio del verano. Se materializó el miedo y las palabras se hicieron demasiado grandes para caber en cualquier parte sin parecer groserias. Me fui poco a poco acostumbrando a ti hasta ir deshaciendo mi notoria ausencia y así llegamos a tener aquella sensación de familiaridad con las palabras, recién construidas en ese sueño embriagador, en donde tú y yo no iríamos a ninguna parte.
(estoy algo cansada chicos así que mañana devolveré los comentarios)
(estoy algo cansada chicos así que mañana devolveré los comentarios)
creo que la pequeña tiene más poder que el pobre tipo que considera dominar la situación.
ResponderEliminaruna piedra es parecido al amor entonces? creo que nosotros podemos ser piedras o viento quedarnos o irnos saludos amiga
ResponderEliminarQuisiera tener familiaridad con las palabras y expresar precisamente lo que quiero, así como tú.
ResponderEliminarBuena reflexión. Cuando se sueña se es libre y alcanzas lo que tu quieras.
ResponderEliminarbesos con cerezas
Ninguna parte a veces es el mejor lugar
ResponderEliminarSobre todo si vas con alguien interesante... ;)
siempre es un gusto leerte.
ResponderEliminarun abrazo
Si no me embriago de sueños, me embriago de poesía, y tú tienes la cuota justa de ambas en este trocito de piedra que tallas con tu escrito.
ResponderEliminarUn abrazo que no es sólo palabra.
:) me gusta como escribes.-
Diria que tus escritos son algo asi como una circonita. Brillan.
ResponderEliminarDescansa pequeña ;)