22.8.10

Niebla amenazante para éste amor.

Solitaria, sublime, única (quizás), inigualable, inolvidable, precisa, intima, incomparable y a veces difícil de comprender era lo que solías decir después de una gran discusión. Luego te marchabas pero luego volvías, siempre volvías, lo peor de todo era ese silencio intimidante, necesitaba romper el hielo, necesitaba deshacerme de aquel muro que nos dividía intentando separarnos.

— Desde un principio te aclaré que no me gusta este silencio, necesito escucharte, el no hacerlo se siente como un espacio vacío. Comenté.
— Pero siempre hay un camino para llenar ese vacío. Más adelante podríamos coleccionar innumerables objetos, momentos y así escudriñar en la invisibilidad de nuestra propia piel, de nuestro amor.
— Y... ¿qué pasa con esos tactos que se llevan incorporados en la memoria o aquellos que aparecen en los días de niebla como lo fue hoy?
— Esos tactos que llevamos incorporados en nuestra memoria pueden aparecer los días de niebla con mayor presencia pero apenas se ven y jamás lograrían alterar la imagen que tú y yo llevamos en la memoria de la piel. Susurró y para mayor remate luego me besó.

11 comentarios:

  1. Me encanta!!!
    es algo supremamente romantico, pero va mas aya de eso, es no saber expresarse lo que se lleva a cabo, los sentimientos, es...
    Una salvacion, eso es...
    es re lindo...

    ResponderEliminar
  2. Y de remate te besó...
    Me gustó esa parte.

    Me pasaré seguido por estos lados. (:

    Saludos Fernanda.

    Fabián.

    ResponderEliminar
  3. que lindo lo que escribiste :) y también el blog


    besos ;)

    ResponderEliminar
  4. maravilloso tema. me encantó.
    un abrazo

    ResponderEliminar
  5. mui lindoo ..me agraadaa qe estes biennn .besoo chaoo :)

    ResponderEliminar
  6. Ha sido todo un honor leerte. Me gusta como escribes ^^

    ResponderEliminar
  7. Que bonito que seria que fueramos capaces de escribir nuestros sueños, verdad??

    Maravilloso

    Besos preciosos

    ResponderEliminar

Mis seguidores