8.8.10

Sobrevolando.

Mientras intentaba salir del mundo de todos escuchando música, mientras caminaba por la acera intentando olvidarme de él... me encontré con ÉL.

— Cuánto tiempo sin verte, cuánto me alegra volver a verte a pesar de que sea culpa mía no verte más a menudo — Comentó
— Mi corazón no está en mis manos, para mi desgracia y mi suerte está en manos de alguien que ahora no me corresponde.
— Esa noche intenté corresponder, aún sabiendo que el amor estaba tan frío como nuestro clima, lo intentamos calentar con los gestos sacados del cariño. Ahora ya vez como nos fue.
— No cierres las manos. No lo dejes aplastar... sólo basta un poco de aliento dulce para revivir lo que alguna vez me enamoró.

6 comentarios:

  1. Muchas gracias por tu comentario! La verdad es que sí, tienes razón...
    esta entrada y tu blog son muy bonitos!
    un besito!!

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Dicen que a todo podemos acostumbrarnos, menos a no comer.
    Se acepta ser feliz con poco, cuando uno así lo decide no hay a quien reclamarle.
    Quiza algún día te decidas y simplemente elijas otra manera de vivir.
    Pero asumir estar enamorado es perder la cabeza, a costa de todo.
    Cuídate, luego nos leemos.

    ResponderEliminar

Mis seguidores